Un sensor de Faraday, construido con un bloque de vidrio óptico BK-7, fue utilizando para desarrollar un transformador de medida de corriente. Se utilizó una fibra óptica para llevar la luz hasta el polarizador y también para conducirla del analizador hasta el fotodector. Debido a la pequeña potencia lumínica que sale del analizador; es necesario utilizar un amplificador de instrumentación para convertir la potencia lumínica en una señal de voltaje proporcional a la corriente eléctrica que pasa por el conductor.